Era una mañana silenciosa y cálida, llena de preguntas y dudas por montón, – quizás como te sentiste justo el día de hoy – de repente todo alrededor se estremeció y sí, la piedra se movió para evidenciar que El Carpintero ya no estaba allí.
Jesús, el Hijo de Dios venció la muerte y al fin se levantó para traer esperanza, salvación y vida a cada ser humano lo suficientemente atrevido para creer en el autor de la vida.
Supongo que lo escuchaste una y otra vez, año tras año, en las pelis de siempre o alguien te lo contó, la pregunta es: